Xavier Rovira, doctor en neurociencias por la Universidad Autónoma de Barcelona, lleva toda su carrera investigadora centrado en entender cómo funcionan las dianas farmacológicas presentes en el sistema nervioso y, ahora, el cardíaco. Su interés por la investigación pública nació mientras trabajaba para una empresa que ofrecía servicios de soporte a proyectos de la empresa farmacéutica.
Biomedicina (BME)
Las estrategias de inmunoterapia basadas en “redirigir” a los linfocitos T, a través de receptores de antígenos quiméricos (CARs, del inglés: Chimeric Antigen Receptors) o anticuerpos biespecíficos (TCE, del inglés: T Cell Engagers), han transformado el pronóstico de algunos tipos de leucemias y linfomas. Sin embargo, sólo una parte de los pacientes obtienen beneficios significativos a largo plazo.
El proyecto se centra en uno de los problemas de salud más preocupantes en nuestra sociedad como es la enfermedad de Alzheimer. En los países desarrollados se ha producido un incremento en la esperanza de vida, que ha traído consigo un aumento en la incidencia de enfermedades ligadas al envejecimiento. Entre estas patologías destaca la demencia, una de las principales causas de discapacidad y dependencia entre las personas mayores en todo el mundo. La enfermedad de Alzheimer es la causa más común de demencia en los ancianos.
La leucemia linfoblástica aguda (ALL, del inglés, Acute Lymphoblastic Leukemia) es un tumor hematológico agresivo, que se origina durante el proceso de generación de los linfocitos, y que constituye el cáncer infantil más frecuente. Existen dos tipos de ALL: ALL de linfocitos B (B-ALL) y ALL de linfocitos T (T-ALL). En ambos casos, el tratamiento convencional es la quimioterapia intensiva. Sin embargo, la frecuencia de pacientes no respondedores a la quimioterapia es todavía considerable y los casos refractarios y las recaídas tienen mal pronóstico.
Los estudios de mi tesis doctoral, realizados en un laboratorio de nueva creación dirigido por el Dr. Andrés Hidalgo en el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), se centraron en entender cómo los neutrófilos (células mieloides de nuestro sistema inmunitario innato) envejecen en circulación y cómo su eliminación es responsable del tráfico de células madre al torrente sanguíneo. Estos resultados se publicaron en la revista científica Cell en 2013.
La enfermedad cardiovascular (ECV) es la principal causa de mortalidad en el mundo, y la mayoría de las muertes por ECV ocurren como consecuencia del infarto de miocardio o cerebrovascular. La principal causa subyacente de la trombosis y los eventos cardiovasculares es la aterosclerosis, una enfermedad inflamatoria que puede permanecer asintomática durante largos períodos de tiempo. Por ello, existe una necesidad urgente de opciones terapéuticas y de diagnóstico en esta área.
Las células madre adultas se encuentran en nuestros tejidos para poder regenerar las células que mueren por la propia renovación del tejido o como consecuencia de una lesión. Seguramente por ese motivo estos progenitores se han identificado y estudiado en más detalle en tejidos en los que la capacidad proliferativa y regenerativa es elevada, como serían el intestino o la piel. Por el contrario, en tejidos con baja capacidad proliferativa y regenerativa, como el páncreas, la existencia de estos progenitores no está clara y es un tema controvertido.
Con el envejecimiento de la población mundial, la investigación biomédica sobre la fragilidad ha crecido sustancialmente. La fragilidad es un síndrome geriátrico que pone al adulto mayor en riesgo de discapacidad, hospitalización y muerte. Retrasarla o incluso revertirla es clave para un envejecimiento saludable.
El sistema sanguíneo o hematopoyético se renueva durante toda nuestra vida gracias a unas células troncales o células madre, que se encargan de producir las células que necesitamos para mantener los tejidos sanos. Estas células madre se producen únicamente durante la vida embrionaria a partir de otras células (endoteliales) y después de esta etapa, tienen la capacidad de autorrenovarse, pero ya no se pueden producir.