En muy pocas ocasiones la Arqueología nos permite rescatar con una metodología pulcra, uniforme y actualizada yacimientos muy complejos que hubieran pasado poco menos que por auténticas ruinas arqueológicas. Este es el caso de dos tumbas megalíticas o dólmenes (El Pendón en Reinoso, Burgos, y La Mina en Alcubilla de las Peñas, Soria) que han sufrido un alto grado de alteración y modificaciones estructurales intencionadas, al haber pasado por diferentes fases de uso y clausura que han acarreado el desmantelamiento de las primitivas sepulturas colectivas monumentales.
Nuestra propuesta pretende conocer la trayectoria cronocultural de estos dos monumentos que parecen haber llevado vidas paralelas. Analizar las dos poblaciones responsables de la construcción y abandono de la tumba y precisar si en cada monumento, quienes lo construyeron son los mismos individuos que los clausuran y abandonan de forma tan drástica y espectacular. Indagar sobre las variaciones intra e interpoblacionales y determinar si son grupos endógenos que permanecen en el lugar a lo largo de toda la trayectoria vital de la tumba o si, por el contrario, reciben aportes poblacionales externos en algún momento de la secuencia de uso, especialmente al final de la misma. Por último, adentrarnos en su relación con el entorno, su adecuación al mismo y conocer cómo ocupan y explotan el territorio.
Para alcanzar estos fines se ha propuesto un proyecto multidisciplinar uno de cuyos objetivos pretende reconstruir los modos de vida y muerte de las comunidades de La Mina y El Pendón a partir del análisis de indicadores paleopatológicos y de marcadores de actividad músculo - esqueléticos. El análisis del esqueleto puede proporcionar información sobre la interacción entre el medio ambiente y el comportamiento del individuo o su forma de vida. La paleopatología permite conocer las enfermedades e intervenciones del pasado que afectan al esqueleto a través del estudio de los restos humanos, rastreando el origen de muchas de estas dolencias que todavía sobreviven en la actualidad.
SE IDENTIFICA LA PRIMERA CIRUGÍA OTOLÓGICA DE LA HUMANIDAD CON SUPERVIVENCIA EN EL DOLMEN DE EL PENDON, REINOSO (BURGOS).
Uno de los primeros y espectaculares resultados de este proyecto de investigación financiado por la AEI ha sido la identificación, previo análisis exhaustivo y preciso de los restos aseos que han ido apareciendo en las excavaciones de el dolmen de “El Pendón”, de lo que se ha interpretado como la primera cirugía de la humanidad practicada en una mujer de edad adulta con supervivencia.
La prestigiosa revista SCIENTIFIC REPORTS, publica el día 15 de febrero de 2022 esta importante investigación del equipo de arqueólogos e investigadores que trabajan en el dolmen de El Pendón, Reinoso (Burgos), dirigidos por Manuel Rojo Guerra, Catedrático de Prehistoria de la Universidad de Valladolid y las investigadoras Cristina Tejedor Rodríguez y Sonia Díaz Navarro.
El trabajo que acaba de ver la luz es un estudio multidisciplinar que, a la arqueología funeraria propiamente dicha, aúna interpretaciones médicas bajo la coordinación de los doctores Juan Francisco Pastor y Jaime Santos e Israel Sánchez Lite, de la propia Universidad vallisoletana, análisis histológicos de superficie llevados a cabo por la Doctora Rebeca García de la Universidad de Burgos, así como análisis traceológicos de la mano de Juan Francisco Gibaja Bao de la Escuela Española y Arqueología de Roma. El enlace al artículo es: www.nature.com/articles/s41598-022- 06223-6
El dolmen de El Pendón ha deparado una ingente cantidad de restos óseos pertenecientes a unos 100 individuos a falta de documentar un último nivel de enterramientos que aún se hallan sin exhumar. Según las dataciones de Carbono 14 que poseemos, la tumba se utilizó a lo largo de unos 800 años entre el 3.800 y el 3.000 antes de Cristo. El monumento sufrió una serie de reutilizaciones, reagrupamientos y reducciones de cadáveres a lo largo de su vida como tumba que nos informa del complejo mundo simbólico y ritual que albergan estas monumentales construcciones funerarias.
El sorprendente hallazgo se produjo en el 2018 y se trata del cráneo de una mujer de avanzada edad que presenta dos perforaciones bilaterales compatibles con sendas mastoidectomías y que se tratarían de sendas intervenciones quirúrgicas que aún se practican en la actualidad destinadas a eliminar infecciones del oído medio del tipo otitis, mastoiditis, colesteatomas…etc.”
La clave de que se haya podido certificar la supervivencia de la mujer después de la intervención radica en el análisis histológico de superficie llevado a cabo mediante un microscopio electrónico de barrido que ha podido identificar tanto los efectos de los osteoclastos (células óseas que se encargan de la reabsorción del hueso dañado) como de los osteoblastos, células que se encargan de la regeneración del hueso. Este efecto de reabsorción y regeneración es simultáneo y se detecta por la presencia de pequeñas depresiones (lagunas de Howship) formadas por los osteoclastos en el proceso de “limpieza de las superficies óseas dañadas” y por pequeños montículos de creación de hueso producidos por los osteoblastos. La presencia de estos dos tipos de estructuras en la preparación microscópica nos permite asegurar que, al menos durante un mes, la mujer sobrevivió a la intervención quirúrgica”.
Es la primera vez que se utiliza con éxito esta metodología en poblaciones de esta cronología de finales del Neolítico. Hasta ahora sólo se había empleado en el campo de la paleoantropología para estudiar el crecimiento del sistema craneofacial en especies fósiles, especialmente en Neandertales. Por tanto, el trabajo servirá, a partir de ahora también, como referencia metodológica en futuros estudios similares.
Este tipo de intervenciones (pese a su antigüedad cifrada en unos 5.300 años), cuya intencionalidad se materializa, además, por la presencia de claras huellas de corte en las zonas afectadas, debieron haber sido realizadas por auténticos especialistas o individuos con ciertos conocimientos anatómicos y/o experiencias terapéuticas acumuladas. En este sentido, el hallazgo en la propia tumba de una lámina de sílex con huellas de haber cortado hueso y haber sido recalentada varias veces a entre 300º y 350º nos autoriza a proponer su uso como un auténtico cauterio o instrumento quirúrgico para la realización de la operación.
Manuel Rojo Guerra es Catedrático de Prehistoria de la Facultad de Filosofía y Letras en la Universidad de Valladolid y director del Departamento de Prehistoria, Arqueología, Antropología Social y Cultural y CC TT Historiográficas de esta universidad. Director/coordinador del Grupo de Investigación reconocido (GIR 139): DURIUS: Investigaciones prehistóricas desde el Duero. En el 2003 fundó ARCADIA: INSTITUTO DE PROMOCION CULTURAL, dentro de la Fundación General de la Universidad de Valladolid. En el año 2003 se le concedió el Premio de divulgación Universidad-Sociedad por el Consejo Social de la Universidad de Valladolid, y en el 2017 el Premio Divulgación Científica del Consejo Social de la Universidad de Valladolid a toda nuestra Unidad de Investigación Consolidada. Sus líneas de investigación se han centrado en la Prehistoria Reciente y en especial el Neolítico Interior, el Megalitismo y el Fenómeno Campaniforme. Ha dirigido varios proyectos de investigación sobre la introducción de la agricultura y la ganadería en la Península Ibérica con estudios en el valle del Ebro, habiendo desarrollado también una intensa actividad científica en los yacimientos prehistóricos del valle de Ambrona (Soria) durante 18 años consecutivos. Ha sido Investigador Principal de 11 proyectos de I+D+I financiados en convocatorias públicas por el Ministerio de Educación y Ciencia o Ciencia e Innovación, de 1 proyecto financiado por La Trobe University (Australia), e Investigador Principal de 69 proyectos y contratos de I+D+I de especial relevancia con empresas y Administraciones públicas, gestionados a través del Instituto de Promoción Cultural ARCADIA.
Se emplea un enfoque multidisciplinario que incluye análisis paleopatológicos y de actividad muscular y esquelética en restos humanos para reconstruir los modos de vida y muerte de las comunidades que interactuaron con estos dólmenes. Un hallazgo destacado es la identificación de la que se cree que es la primera cirugía de la humanidad en una mujer que sobrevivió a la operación.
Referencia: PID2020-116548GB-I00
Programa: Programa Estatal de Generación de Conocimiento y Fortalecimiento Científico y Tecnológico del Sistema de I+D+i – Agencia Estatal de Investigación (AEI).
Título: Proyecto I+D+i 2020 «Generación de Conocimiento»: ¿Biografías paralelas? Bioarqueología de dos megalitos excepcionales.
Investigador: Manuel Rojo Guerra.
Entidad beneficiaria: Universidad de Valladolid.
Área temática: Estudios del pasado: historia y arqueología (PHA).
Duración: 4 años.